Cortina de Felicidad

Hoy quiero compartirles algo que puede ser insignificante a los ojos de muchos, pero que para nosotros representa un gran paso hacia adelante.

Gracias a Dios tuve la dicha de poder diseñar y construir desde cero nuestra casa propia, y como les he contado anteriormente, aún nos faltan muchas cosas por terminar y otras por hacer.

Trabajando los cimientos de la casa

Sin embargo, este proceso de construcción y mantenimiento se me parece tanto a nuestra relación, que por eso me encanta comparar el construir una casa con construir una relación de pareja.

Y es por ese motivo que hoy, sin planificar mucho, encendí la cámara y grabé este momento, que puede ser tonto, pero que para nosotros tiene un gran significado.

INSTALAR UNA CORTINA

Si, así como lo leen, instalar una cortina enrollable, black out, ha marcado un antes y un después en nuestra calidad de sueño, pero más que eso, hay una gran lección detrás de eso.

Desde que empezamos a construir y comprar las cosas de la casa, ambos coincidimos en no hacer, o no comprar algo, de lo que no estuviéramos 100% seguros de que nos gustaba, ¿por qué? porque lo vamos a ver muy probablemente por más de 10 años o incluso el resto de nuestra vida, así que podría decirse que hemos pasado algunas “incomodidades”, hasta tener definido qué queremos y el presupuesto que necesitamos para hacerlo.

Esto se ha convertido en una filosofía de vida que hemos adoptado y que nos ha gustado aplicar prácticamente a todo.

Y aunque comprar una cortina no representa un gran gasto, no habíamos sentido la necesidad de hacerlo.

Hasta que hace unos días, dije: "ahora sí, ya quiero una cortina" y aquí estamos, con manual en mano, instalando una.

Lo digo una y otra vez, vivir este proceso de construcción ha sido un gotero constante de felicidad.

Comprar una casa terminada, debe ser una experiencia maravillosa que me gustaría algún día vivir, para evitar las preocupaciones y el corre corre, pero ser parte del proceso de construcción también tiene su encanto, pero sobre todo me ha dejado muchas lecciones, tantas que aún sigo aprendiendo.

Como me dijo un día mi papá: - por la casa no se preocupe, le queda toda la vida para terminarla.

Y aunque en el momento fue una cara de terror lo que hice, he entendido que mi papá tenía razón.

A veces es muy fácil estresarse por no tener lo que queremos ya, pero la mayoría de las cosas requieren paciencia y esfuerzo.

Y así, paso a paso se irán logrando, pero sobre todo muy importante, creo que se disfrutan más.

Espero hayás disfrutado vivir conmigo este pequeño momento, pero que a nosotros nos ha dejado una gran lección.

Ahh y por cierto, acá les dejo el link de la ferretería donde compramos la cortina, por si ven algo que les guste. https://cr.epaenlinea.com/catalogsearch/result/index/?p=1&q=Enrollable

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Gracias por leerme y nos hablamos pronto.

Un abrazo.